Ha sido una boda un tanto fría ya que cuando Charlene ha llegado al altar no ha habido ni tan siquiera un intercambio de miradas entre los ya casados. Ella no parecía demasiado cómoda en el papel que le ha tocado interpretar y no se ha visto una sonrisa suya hasta el final de la boda. Cuando ha entregado el ramo a la virgen de Santa Devota no ha podido contener más la emoción y ha roto en lagrimas.
Charlene esta vez acertó de pleno y estaba deslumbrante con un vestido blanco en satén diseñado por Giorgio Armani que también acudió a la ceremonia. El escote tipo barco que le disimulaba su espalda de nadadora. Por todo el centro del vestido llevaba unos bordados. Lo único que no me ha gustado han sido los zapatos que lucía, para mi gusto le sobraba la plataforma. Otro detalle a destacar es la ausencia de joyas. Collar no, pero una pulsera yo sí que le hubiera puesto. El pelo lo llevaba en un recogido adornado con un bonito pasador de brillantes. La cola espectacular de unos 5 metros tenía que pesar lo suyo porque en el camino al altar se notaba como le costaba tirar de ella.
El novio iba vestido con un traje blanco sucio que no me gustó nada. Parecía querer quitarle protagonismo a la novia.
En cuanto a los invitados al enlace destacaron la familia del novio. Entre las mejores vestidas del día estuvieron Carolina ,con su innata elegancia, y Carlota Casiraghi vestida de Chanel como su madre. La diadema con rejilla que cubría parte del rostro de Carlota era de 10.
Estefanía ,a la que ayer encontré muy envejecida, escogió el mismo color que su hermana pero no consiguió un resultado igual. Si el día de la boda civil la mayoría eligieron el azul, ayer fuel el dia de los rosas pasteles.
La realeza europea no faltó a la cita y se notó la ausencia de la casa real española. Una pena que no haya ido Elena con su chaquetilla de torera, que gran momento.
Mette Marit acompañada de su marido Hakoon de Noruega iba en el color del día pero su vestido era muy soso y muy cerrado.
Mary Donaldson no me gustó nada, a pesar de que apostó por el color. El chaleco de su marido no tiene comentarios.
Victoria de Suecia acompañada de su marido no iba mal, pero tampoco destacó entre las mejores vestidas.
Maria Teresa de Luxemburgo, de la que me gustó mucho su chaqueta de pailletes y su tocado en el mismo tono.
Sofía condesa de Wessex que acudió en representación de la familia real inglesa.
Silvia de Suecia con un vestido de color lila muy acorde para su edad.
Matilde de Bélgica iba bastante bien, pero me sobran los guantes.
Magdalena de Suecia
La mejor vestida entre todas ellas fue sin duda Máxima Zorreguieta con un vestido en un color naranja tan veraniego.
Paola de Bélgica muy elegante.
Duquesa de Braganza, con el lazo un poco torcido jeje
Filiberto de Saboya y su mujer Clotilde Courau.
Al enlace también acudieron diseñadores y modelos.
Karolina Kurkova guapísima con un diseño de Chanel.
Naomi Campbell, rompiendo el protocolo, con un vestido largo especatcular de Alexander McQueen.
Roberto y Eva Cavalli.
Roberta y Giorgio Armani. A Roberta no le sentaba bien su vestido en la zona del pecho.
Karl Lagerfeld.
Margarita Vargas y Luis Alfonso.
Roger Moore el antiguo 007.
Ines de la Fressange y sus hijas, recién llegadas de la playa.
Farah Diva
Bernadette Chirac
Tras la ceremonia se realizó el convite en la Ópera Garnier de Mónaco y los asistentes se cambiaron para ello, mostrando, ahora sí, sus mejores galas.